No existe fórmula mágica para la entrevista

Me encantaría darte pautas para tener éxito en una entrevista de trabajo, enumerarte las claves a tener en cuenta e incluso decirte qué deberías responder a esta o aquella pregunta…

De verdad que me gustaría.

Pero lamento decirte que no se trata de estudiar qué contestar, de planear un discurso estándar que vas a transmitir, ni siquiera de ser original y dar con esa respuesta que el entrevistador está deseando escuchar.

Un buen entrevistador no estará esperando la respuesta ideal ni la correcta porque cada candidato es diferente, cada proceso es distinto y cada conversación que surge en una entrevista es única.

Lo que sí te voy a contar es todo el trabajo que tienes que hacer contigo mismo en base a tres puntos muy importantes: qué debes mostrar, cómo lo debes transmitir y qué aporta valor en un candidato.

QUÉ DEBES MOSTRAR

Aquello que sabes hacer, ni más ni menos. Y no se trata sólo de eso, debes ser capaz de discernir, de todo lo que sabes hacer, qué es útil para ese puesto y cómo lo vas a mostrar.

Para ello, te recomiendo:

  1. Haz una lista de todas las competencias desarrolladas en anteriores trabajos.
  2. Haz otra lista de todas las tareas o funciones desarrolladas hasta ahora.
  3. Con la oferta en tus manos, trata de ir desgranando qué es importante para ese puesto, qué tareas y competencias son imprescindibles.
  4. Piensa “yo no contrataría a nadie que no supiera hacer…”
  5. De ahí, elige cuáles (de las tuyas) te sirven para contar en la entrevista acordes al puesto al que te presentas.

¿Para qué sirve esto?

Para que no se te olvide qué información o experiencia es indispensable que salga en la entrevista, para que no te vayas sin haberlo contado y para que te asegures de que esa información llegue al entrevistador sí o sí.

¿Qué conseguimos?

No dispersarnos, no hablar demasiado de nosotros mismos sin llegar a ninguna conclusión, no hablar de cosas abstractas y sí que haya una coherencia entre lo que has hecho (tareas/funciones), cómo lo has hecho (competencias/habilidades) y el perfil requerido en la oferta.

CÓMO LO DEBES TRANSMITIR

Si te queda claro qué es necesario mostrar, deberás darle forma y elaborar un mensaje o varios que integren todo eso.

Reflexiona sobre qué situaciones en tu vida laboral demuestran que has hecho eso bien o que lo sabes hacer.

Relata experiencias concretas que den una idea clara al entrevistador sobre cómo has desarrollado tu trabajo, qué habilidades fueron necesarias y cuál fue el resultado.

Así que necesitas hacer un ejercicio previo de recopilación de todo esto para que, en el momento que surja hablar de ello, tu comunicación sea fluida y tengas muy clara en tu cabeza la estructura del mensaje.

Ten en cuenta siempre que no es solo lo que transmites, sino cómo lo transmites. Mucho cuidado con la comunicación en este sentido.

QUÉ APORTA VALOR

Comunica tu propuesta de valor, esa de la que todo el mundo habla, pero no tienes muy claro qué es (te lo explico paso a paso en este post).

Es aquello que transmite a tu potencial cliente (la empresa que te contrata) los beneficios que obtendría esa empresa si te contratase y por qué deberían elegirte a ti frente a otros candidatos. Es el beneficio o resultado que obtiene la empresa si te contrata, .

  1. Por un lado, tienes todo lo que debes mostrar.
  2. Por otro, cómo lo debes mostrar.
  3. Conjugando todo eso hazte varias preguntas: ¿para qué le sirve a la empresa? ¿qué solución aportas? ¿qué gana la empresa si te contrata?

Te pongo un ejemplo de todo lo que te he contado:

Puesto: dependienta en tienda de ropa

Una de las competencias imprescindibles es la “atención al cliente”, ¿verdad?

Así que a la hora de hablar de ella pondrás un ejemplo concreto de cómo lo haces:

“Me acerco con una sonrisa y pregunto amablemente si puedo ayudar. En caso de que diga que sí, soy bastante hábil en detectar rápidamente su necesidad y le muestro aquellas prendas que pueden ajustarse a lo que busca, incluso asesorando en el color que más le puede favorecer o informándole del estilo que está a la moda y el modelo que más se vende”.

A la empresa todo esto le interesa mucho, claro, pero ¿qué beneficio le reporta? (porque las empresas quieren ganar dinero, ¿no?).

“De esta forma fidelizo al cliente, si queda satisfecho volverá porque he ajustado la oferta a su necesidad. Además, suelo mostrarle algún artículo más que puede complementar lo que va a comprar, para así aumentar la venta”.

Como ves, no existe fórmula mágica, la magia la haces tú.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s